La nefrítis es una lesión secundaria a la púrpura alérgica y es una enfermedad autoinmune sistémica. El daño renal puede ocurrir en aproximadamente un tercio de los pacientes con púrpura alérgica, y es más frecuente en niños menores de 10 años. Por lo tanto, es especialmente importante comprender la purpura nefrítica alérgica, así como controlar los factores que la previenen y prevenir su aparición.
¿Cuáles son las causas de la púrpura alérgica? La mayoría de los pacientes han tenido un resfriado o han ingerido mariscos (como pescado, camarones, cangrejos y almejas) antes de la enfermedad. Un pequeño número de niños se debe a inyecciones profilácticas como antibióticos, yodamina, isoniazida, salicilatos, barbitúricos y yoduro. Esta enfermedad, que se produce por infecciones respiratorias precursora o por el consumo de mariscos y medicamentos, se denomina clínicamente púrpura alérgica.
Los síntomas de la púrpura alérgica incluyen: Por lo general, cuando el paciente presenta erupción dentro de 4 a 8 semanas, los riñones se dañarán en cierta medida. Los pacientes con nefrítis purpura alérgica clínicamente se caracterizaron por la aparición de hematuria aislada, en algunos casos con proteinuria y edema.
¿Cómo ocurre la nefritis púrpura alérgica? Cuando la función inmune del cuerpo humano es normal, puede producir inmunidad humoral e inmunidad celular contra el antígeno no hexílico y desempeñar un papel inmunoprotector en el cuerpo. Cuando el sistema inmunitario está disfuncional, las bacterias externas, los virus, los mariscos, los medicamentos, etc., pueden causar reacciones alérgicas, enfermedades autoinmunes o inmunodeficiencias, que pueden dañar la salud humana. Los antígenos producidos por estos factores patogénicos se unen a los anticuerpos en el cuerpo para formar complejos inmunológicos que son más propensos a ser depositados en los glomérulos, lo que inicia el proceso de fibrosis renal.
Los niños tienen una inmunidad más débil que los adultos y son naturalmente menos resistentes a las enfermedades. Los niños con púrpura alérgica son propensos a contraer resfriados, especialmente durante la estación fría o después del frío. Cuando el virus del resfriado invade el cuerpo de un niño, es probable que forme un complejo inmunológico con anticuerpos en el cuerpo y actúe sobre los riñones, lo que lleva al desarrollo y agravamiento de la púrpura alérgica, por lo que es especialmente importante prevenir el resfriado.